El desempleo es una oportunidad para invertir en ti

Hoy me apetece pensar en voz alta con ustedes…
¡Cuánto se ha escrito sobre el desempleo!
Titulares, estadísticas, monografías… ha sido y es el tema por excelencia en oficinas gubernamentales, centros de salud, puertas de colegios, bares y parques. Todos somos conscientes de que el desempleo no es bueno, es dañino para la persona, para las familias, para el sistema… pero pocos se han atrevido a definirlo fuera de los conceptos económicos a los que nos acostumbran los telediarios y la prensa. Pocos entendemos el desempleo en términos emocionales, precisamente porque pocos somos los que vemos el trabajo/empleo como algo más que un medio de vida. Y sí, lo primero es la comida, «poder echarnos el pan a la boca»… pero ¿acaso la autorrealización, el desarrollo personal/profesional no son necesidades del individuo? También, en otra escala de prioridades SÍ, pero también. Y es que cuando la persona no está bien, nada a su alrededor lo está.
Sin rodeos, el desempleo es el vacío. Podemos llamarlo trance, período de transición, inactividad laboral… pero no, para nosotros es la nada, es el vacío. Y no, NO es el fin del mundo… aunque para nosotros lo sea… porque el mundo sigue, la vida transcurre igual (¡mira a tu alrededor!) … no busques culpables (aunque los haya), ni consejos (aunque nos necesites) porque nadie puede ser más protagonista de tus reflexiones/decisiones que tú. Y aunque te aferres a ese fin del mundo que acabas de experimentar, recuerda que no ha sido así … nada ha cambiado, salvo tu «ahora», tu «hoy», es tu rutina la que ha desaparecido.
¡Pero cuánto podemos hacer para cambiar el «mañana»! Sí, un poco de optimismo pero también de realidad… ¡PODEMOS! Todo es cuestión de ACTITUD! De ahí la importancia de crearnos tareas de búsqueda activa que plasmemos en una agenda de empleo: Visitas a recursos, inscripciones en portales online, actualización del CV… otras rutinas, diferentes pero ideales para esta nueva situación TRANSITORIA que vivimos.
Debemos convertir la agonía, la desazón, la frustración, el desespero, los tiempos muertos… en PRODUCTIVIDAD, no para otros, NO… para uno mismo. Ahora toca invertir en ti.  Serás el empresario de tus sueños/anhelos… y te levantarás cada mañana para apostar por la idea empresarial más brillante que has tenido nunca: Tu FUTURO. Y es que cuando la persona está bien, TODO a su alrededor mejora.
Obviamente nada de lo dicho conforman los ingredientes secretos de una receta mágica, y al igual que los medicamentos, no operan igual en todas las personas. Quizá sea ése el componente más decisorio: LA PERSONA! Debes poner mucho, MUCHO, de tu parte… es una lucha/guerra interna. Poco a poco debemos llenar ese vacío de proyectos, de futuro, de deseos, de ideas… y con el paso de los días, no habrá vacío… sólo ilusiones, fuerza, oportunidades, y ganas.

El Hierro Fuerteventura Gran Canaria La Gomera La Palma Lanzarote Tenerife

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.